sábado, 31 de agosto de 2019

Reineke el Zorro



                 


 Todos los animales veneran al rey León, se inclinan ante él, le besan la mano: quien más se humilla delante de su tiránica majestad es el zorro Reineke que le lame el pie. Porque bajo la sombra del poder crece el crimen. El zorro Reineke bien sabe eso, conoce las reglas y sabe manipularlas.
El cuadro hecho por Wilhelm von Kaulbach[1]ilustra la vida hábil y astuta del zorro Reineke; la ilustración adquiere ante nosotros  una inesperada actualidad. 
Reineke se va triunfante, regresa a su hogar fortaleza para seguir cometiendo sus fechorías; ya tiene la aprobación de su vida de delincuente por parte de la máxima autoridad: el rey León y su simpática corte populista.
Cuando todo se mueve por el egoísmo ‘sano’ y recalcitrante, el más hábil y astuto se lleva la corona de laureles. Nos sorprende cuánto nos enseña la literatura clásica sobre la situación política que vivimos en estos tiempos.


Sitiados por zorros de todos los continentes, vivimos la alteración de los que fueron -en teoría y en la práctica los principios fundamentales de la democracia. Unos mordiendo aquí, engañando allá y con explosivos discursos acullá, nunca olvidan lamer a la opinión pública. Un “demos” que le permite al astuto zorro hacer prácticamente lo que le venga en gana, con la ley o sin ella… lo que convenga. El populismo ejerce una nueva dictadura y en el nombre del rey León recibe el beneplácito por su conveniente egoísmo.
A zorros como Trump y Boris Johnson, por ejemplo, los tiene sin cuidado el olvido de los principios de códigos que seguramente les resultan pasados de moda. Otros zorros son Orban(Hungría), Salvini (Italia), Uribe (Colombia) o Bolsonaro (Brasil), sin olvidar a Putin y Érdogan. 
Zorros admirados e incluso venerados.
Son fáciles de detectar porque no esconden ni sus lamidas convenientes ni tampoco sus mordiscos envenenados. 
Es el YO el que se erige con majestuosa soberanía porque los zorros modernos están seguros de que obtendrán el aplauso del ‘pueblo’ para toda su sagrada y mística mentira.
 Concluyo en acuerdo con Goethe y Kaulbach que quien entrega el poder al populismo finalmente pagará las facturas. 

friedrichmanfred y anavictoria  agosto  2019




[1]Wilhelm von Kaulbach – 1805 -1874 – ilustración de ‘Reineke Fuchs’ de J.W.Goethe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario