observaciones y reflexiones de un alemán después de leer:
Alemania, Europa, Asia
por José María Carrascal
(ABC de 1 de mayo de 2012)
1. --Es interesante todo intento de
apartarse de clichés conocidos para apreciar la división que hay en Europa de
divergentes culturas económicas y mentales. Lo que podría considerarse una
riqueza del viejo continente, durante la crisis se presenta como problema. Hay
voces que reclaman el final de la unión monetaria y con ello el colapso de la
UE.
2. –Existen - ¿quién podría negarlo? -
una economía fundada sobre la productividad y otra construida principalmente sobre
el consumo. Que eso coincide sobre el esquema de la tradicional división entre
norte y sur, sólo en parte es correcto. Irlanda, Inglaterra o Noruega son
paises del llamado norte, pero sus economías giran alrededor del "Profit",
del beneficio especulativo, de la venta de servicios, o de riquezas en mar y
suelo, similar a España. Según Carlos Marx, capital se recrea acumulando,
únicamente durante el proceso de la producción. Servicios p.ej., crean
beneficios, pero solamente si hay un sector industrial productivo al lado.
Llamar católico el vivir consumiendo y protestante el estar produciendo
es muy simplificante. La región más productiva en la actual Europa parece que
es Baviera, ya hace tiempo no conoce desempleo y es católica y las regiones del
norte - este alemán, ateo – luteranos, viven subvencionados por el sur alemán.
Max Weber, el fundador de esa identificación de protestantismo calvinista con
capitalismo, tuvo que rectificar sus tesis al final de la vida. Otros han
despertado.
¿Qué haríamos con los asiáticos todos? ¿Cómo explicar esa
explosión económica? ¿Hay un lugar más capitalista que Singapur en el mundo?
3. ––Me opongo a prolongar la historia
alemana hacia la prehistoria: ¿Cuándo, dónde y con quién comienza Alemania?
Dicen que con Carlomagno.
¿Quién era Carlomagno?
Naturalmente pertenecía a una étnia germánica, la de los francos, hablaba un
alemán antiguo.
¿Pero era por eso alemán, un alemán del siglo IX?
Karl der Grosse como decimos en Alemania extendió su reino
hacia tierras eslavas, incluyó a Bohemia, la Chequia actual, en el ámbito
occidental. Su reino coincide con el núcleo geográfico de la Unión Europea.
La población germánica de entonces vivía repartida sobre el
territorio de media Europa. Entre ella se destacaban los francos del oeste -
romanizados y los del este, dueños de primeras manifestaciones escritas de la
lengua alemana. Cuando estos francos se unieron en un mismo ejército ya
necesitaban intérpretes. Existe el texto del juramento en ambos idiomas, en
francés antiguo y en alemán. Los idiomas distintos no marcaban todavía la
división en naciones modernas. Había Francos / Oeste y Francos /Este;
posteriores franceses y alemanes. ¿Nacieron con eso Francia y Alemania como
hermanos gemelos? Todavía no. Pero los embriones se habían formado.
Como fundador del imperio medieval, cuna de la posterior
Alemania es considerado Otto I, rey de la parte oriental del imperio carolingio
desde 936. Su victoria sobre los invasores húngaros y la conquista de
territorios eslavos en el este como la extensión de su reino hacia Italia
justifican el apodo Otto der Grosse. En 962 fue coronado Emperador Romano por
el papa y declarado protector oficial de la Iglesia de Roma repitiéndose así el
destino de Carlomagno. En la sombra de esta tradición Alemania lentamente
evolucionó hacia una identidad propia.
4. ––La sombra de la antigua Roma sigue viva en Europa durante más de mil años y
la iglesia de Roma es su magnífico y duradero testimonio hasta hoy.
Además, hubo un cambio fundamental: El peso real, económico,
político y cultural se había concentrado en el triángulo formada por Flandes,
Viena y Venecia y crecieron poder y responsabilidad de los reyes alemanes,
protectores de la Santa Sede Romana. En cambio necesitaban el título de
Emperador del <Sacrum Imperium Romanum>
y más tarde se agregó <Nationis Germanicae>[1]. Esta función no
se heredaba, el monarca fue elegido por el gremio de príncipes electores,
privilegiados entre los nobles reinantes, entre ellos tres obispos. En este
Imperio no existía ningun centro administrativo, el monarca en compañía de su
corte, igual a vendedor ambulante recorría el país de palacete en palacete.
Coronado como Emperador Romano, su autoridad crecía y crecieron también celo y
rivalidad entre ambas instituciones, la terrenal y la religiosa, hasta llegar a
una abierta enemistad porque la mútua dependencia era incómoda para ambos. Era
un conflicto inevitable que tuvo eco en las reclamaciones de la Reforma.
Sin embargo, todo eso sucedió bajo presión de otro evento
esencial: el renovado Imperio Romano en el centro de Europa no
debía su existencia al crecido poderío alemán sino al hecho que la zona
del Mediterráneo fue invadida por poderes islámicos. El corazón de Europa se implantó en Europa
central dejando a Roma atrás como símbolo, referencia espiritual y sagrada
tradición.
5. ––Cierto es que el destino de
Alemania está inscrito en su geografía. Todos los problemas surgidos durante
los últimos quinientos años en el centro de Europa han sido geográficos.
¿Alemania, dónde está? pregunta Schiller, y contesta.¡No la encuentro! Sin
embargo se ha desarrollado un modo de ser específico que se caracteriza por
"alemán". Es más cultural que étnico y poco tiene que ver con raza o
religión, aunque todo ello haya tenido influencias sublimes o imaginadas.
6. ––El término del "Tercer Reich"o “Drittes Reich” es
una construcción ideológica nazi que nada tiene que ver con el Imperio medieval
y sólo usa el mismo término en la continuación de la obra unificadora de
Bismarck, que nunca se ha llamado Segundo Reich. Es un invento nazi. La
República de Weimar también se llamaba oficialmente Deutsches Reich.
Reich es un vocablo[2]
portador de diverso significado: En el Padrenuestro alemán se menciona dos
veces, y el reino de los cielos es el “Himmelreich”. La sede del parlamento en
Berlín hasta hoy se llama Reichstag. La misma palabra la usan suecos y
finlandeses en sus idiomas respectivos. Sin embargo existe el mito del Reich.
¿Qué podemos hacer los alemanes para que nos dejen de
contemplar bajo el signo del Tercer Reich? ¿Gira la historia de Alemania
alrededor el Reich de Hitler como eje crucial? Hacerse eco del ideograma nazi
sugiere que hay un antes y un después del cabo austriaco.
De acuerdo a lo dicho, ciertas voces críticas europeas actuales
opinan que se está formando el Cuarto Reich bajo la canciller Merkel.
¿Sobre qué datos concretos se funda esa tesis?
(¿Qué harían los griegos, si tuvieran que pagar a los alemanes
cuando estos se otorguen cuantiosos beneficios sobre la base de empleos subvencionados
e improductivos?)
7. ––Es correcto
decir que Alemania mira hacia el este por interés y por tradición. No hay que
sobrevalorar el deseo de vacaciones en tierras cálidas del sur. Pero el término
“Lebensraum” (Espacio vital) nazi es
solamente otra perversión ideológica más en clara oposición a los intereses
naturales de la propia Alemania. Era completamente absurdo proyectar una
sociedad campestre con explotación permanente de esclavos en pleno siglo XX,
renovar una especie de Esparta, parece una creación de novela de ciencia
ficción. Este proyecto fantástico jamás encontró realización. El intento de “germanizar”
territorios ocupados por la Wehrmacht fracasó desde el pricipio. No se encontró
gente dispuesta a ocupar tal actividad. Y los experimentos que hicieron en
Polonia trasladando a alemanes a estos territorios fracasaron, porque los beneficiados trataron de huir de ahí cuando
podían. Los tiempos de colonizar y repoblar territorios robados a los vecinos
definitivamente había pasado. Un país como Alemania industrializado desde
varias generaciones no necesitaba tierras para cultivos, ni disponía de
recursos humanos para revivir una producción agrícola ya histórica. No fue un
acto de imperialismo colonizador, era una locura de ideólogos mentalmente
cerrados e incompetentes. Europa del este no era el oeste americano y polacos y
rusos no servían para ser como los indios de película. Pero esa acción demuestra
que la irracionalidad puede abrirse campo en la realidad temporalmente, creando
tragedias humanas sin fin ni sentido. Otras ideologías modernas confirman lo
que la sinrazón es capaz de hacer para imponerse sobre el más sencillo sentido
común. No solamente es falta de conciencia humana, es simplemente cosa de
locos.
Mantengamos la alerta, huellas
ideológicas son duraderas, y sin querer comenzamos a pensar en las líneas
concebidas por ellas. Los extremismos modernos de derecha e izquierda en Europa
son la viva demostración de esa ley social. Desgraciadamente nada de lo que
pasó ha pasado definitivamente y aunque los locos mueran, las locuras
persisten.
8. ––En síntesis: mantengo,
primero hay que crear capital para poder repartir bondades. Repartir dinero por
si solo no crea bienestar duradero.
Y esa es la razón de la tendencia a
crear enclaves en Europa del sur con estructuras feudales, similares a la era
preindustrial. Han nacido aristocracias modernas en forma de poderosos
sindicatos, cuadros políticos y órganos estatales, personajes influyentes en
puestos clave de la administración que reparten lo que no ha sido creado por
ellos, pero corresponde a derechos y privilegios habilmente construidos; o –
más simple todavía - hacer de favoritismo y corrupción una forma de vida, un
sistema social.
Eso se ha defendido de forma
cubierta durante la campaña electoral en Andalucía, declarado como progresista,
justo y de auténtica izquierda. Y los electores han votado masivamente por
ello.
Yo preveo lo siguiente:
Lo que en realidad sucedió era, poner
en peligro el tesoro más sagrado de la democracia: la libertad y con ella la
creatividad y el espíritu de innovación;
libertad es reducida a un bien colectivo, administrado por el estado y sus
administradores y expropiada a los individuos en nombre de la igualdad, lo que
en la realidad significa que unos han de ser más iguales que otros. Feudocracia
revivida. El eslogan franquista “todo por la patria” se convirtió en “todo por
el pueblo”.
friedrichmanfredpeter
5 de mayo de 2012
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