sábado, 21 de enero de 2017

¿Dónde está ella? ----- la flor azul

(Wo ist sie? … Die Blaue Blume)



El poeta alemán Novalis  inventó la flor azul y envió a su alter ego “Heinrich”a buscarla. También Josef Freiherr von Eichendorff trató, sin éxito, de encontrarla. Desde aquella era, llamada romántica, la siguieron buscando muchas personas, principalmente hombres porque entre los pétalos azules solía esconderse también la imagen de la mujer amada. Pero en realidad se trata de una flor invisible, símbolo de la insatisfacción que causa el ambiente material que rodea a quien la busca. No es casual que  “Die Blaue Blume “ brotara justo en el preciso momento  en que la revolución se echó a dormir, cuando la era napoleónica terminó y una cortina formada por la Santa Alianza echó su peso sofocante sobre la Europa de entonces. El velo reaccionario apagó las luces que una generación antes iluminara a los países europeos.
Y cuando en el año 1848 los cascos picudos prusianos invadieron el último refugio de los demócratas rebeldes en Friburgo, entonces numerosos demócratas se escaparon primero a Francia y luego a las Américas, entre ellos Friedrich Hecker  que llevaba el sombrero ancho con pluma roja.
Así se cantaba entonces:

“¿Vive el Hecker todavía?
Sí, aún vive.
No cuelga de ningún árbol,
No cuelga de ninguna soga,
Colgado está del sueño
de la República Alemana.”

(“Lebt der Hecker noch?
Ja, er lebet noch.
Er hängt an keinem Baum,
Er hängt an keinem Strick.
Er hängt am Märchentraum
Der Deutschen Republik!”)

Los seguidores del  Hecker  colocarían una flor azul en sus sombreros y en adelante se dedicaron a buscar “Die Blaue Blume”.
¿Qué hizo el Hecker mientras tanto?
Se alistó como soldado en el ejército Yanqui, “los azules”, para liberar a los esclavos negros del Sur, eso pensaba. Y ahí se quedó, si buscaba “Die Blaue Blume” no la encontró, al Hecker y a su sueño los cubre  tierra norteamericanas.

Hoy, 20 de enero del 2017,  es un día definitivo para que recordemos todo esto. Porque alguna vez fue América el refugio para los peregrinos buscadores, no solamente de oro. A un descendiente de alemanes del tipo ”buscadores de oro”  lo “coronan” hoy en un fastuoso, falso y mediático show que colmará hasta la náusea toda la TV mundial . Yo añoro a los otros, a los que nunca hallaron ni coronas ni oro, los que iban en busca de un ideal cuajado del color de una flor. “Die Blaue Blume” es mucho más que una metáfora poética. Es el diseño inmaterial de un proyecto que nos acompaña y nos consuela sobre todo en un día como este cuando es coronado un descendiente alemán pueril y falso.
El verdadero alemán soñador aún está esperando, se llama  Friedrich Hecker, luchó y cayó por la causa de la libertad en tierra americana. Yo  le dedico esa bella flor que encontré en la red y la llamaré “Die Blaue Blume”; simboliza los sueños imposibles a realizar en su momento histórico, reclama libertad, igualdad, derecho y justicia para todos, americanos y otros que no lo son.

friedrichmanfredpeter  20 de enero de 2017
anavictoriaoeding edición

No hay comentarios:

Publicar un comentario