Y efectivamente
el 3 de octubre de 2010 Alemania pagó la última porción que le quedaba de la
deuda del Tratado de Versailles de 1920 : 95 millones de Euros. Alemania
todavía debía ese dinero para indemnizar a los vencedores de la Guerra de 1914
– 18. Cuando en plena guerra el gobierno francés pidió dinero a los bancos
americanos, surgieron dudas si Francia podía devolver ese préstamo. Pero el
primer ministro Clémenceau tranquilizaba a los banqueros y dijo: “Le boche[1]
paiera!” Estaba seguro de la victoria militar después de la declaración de
guerra de los EEUU contra el Reich de Wilhelm II.
Alemania pagó y
pagará. Eso esperan griegos, italianos y españoles que así lo exigen porque la
industria alemana dedicada a exportar sus productos ha sido la más beneficiada
de la introducción de la moneda común, el Euro. Y son bancos alemanes que detienen
la mayor parte de la deuda de estas naciones. Alemania pagará, pero hay que
arrancárselo. Pues nadie paga con gusto la deuda ajena. Y un gobierno cuyo
principal preocupación en democracia es ser reelegido se enfrenta a la
oposición creciente de los ciudadanos que no se sienten beneficiados, sino todo
lo contrario, han sufrido notables recortes salariales durante la crisis. Y
sospechan que sus socios se dedicaran a gastar, mientras ellos, conformes con
las medidas de austeridad, ahorraban.
El gobierno decididamente proeuropeo de la
canciller Merkel en el extranjero ganó simpatía, pero en Alemania sucede todo
lo contrario, y es muy probable que no será reelegido. Sin embargo, cualquier
alternativa política se enfrentará a la misma encrucijada. Si los socios no
reforman sus economías basadas en servicios y consumismo, Alemania se
enfrentará a un superavit comercial en crecimiento que amenaza el equilibrio en
la Unión Europea. Y son los viejos fantasmas del rencor y odio que se
despiertan. Ante ese peligro sólo temporalmente sirve el calmante: ¡Alemania
pagará!
Hay que
eleminar las causas estructurales en la Unión.
¡Más Europa! debería motivarnos a todos. Solamente así se olvidará el
famoso dicho: “le boche paiera!”
manfredpeter,
16 de octubre de 2011
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