sábado, 21 de mayo de 2011

¿Rebeldes?

En numerosas ciudades de España se manifiestan entusiastas multicolores en protesta por la situación política y social en el país.

Su simpatía y cordialidad en las entrevistas esconde una romántica simpleza que entusiasma al observador de ese inesparado síntoma de revolución española.
Pero hay otros, que al salir de la izquierda han dejado atrás  entusiamo y  recetas fáciles, y se encuentran como caballos sobre un camino pedregoso mientras pegasos volantes los sobrevuelan camino al sol.
Los socialistas de todos los colores hasta ahora no han sido capaces de crear más que  sociedades enfangadas en el totalitarismo, con un ejercicio de control mafioso del poder.

martes, 3 de mayo de 2011

Jerusalén – Berlín ... ¿Ida y Vuelta?

-¿Te vas a Berlín? preguntó la periodista alemana a la joven muchacha israeli, quien le acompañaba para tomar un café en un lugar céntrica de Jerusalén, después de haber pasado  un control minucioso por una agente de seguridad.
-Todos los días es así, comentó A.D. con resignación,
- pero ahora me voy.
Y sacó un pasaporte rojo de la UE con el águila de “BR Deutschland“.
-Ya no soy turista, es para quedarme.


El genocidio nazi

¿En qué consiste su singularidad?

-Su fundamento ideológico: el racismo seudocientífico
( materialismo biológico ) define “judío“ como elemento
opuesto al “ario“ cuyo defensa exige la eliminación de aquel como acto purificador. Esa actitud es consecuencia del “antisemitismo“. El programa antisemita es justificado por la intromisión indebida de los judíos como pervertidores de los demás pueblos. La utopía de una jerarquía de razas en el lugar de una sola humanidad tiene numerosas fuentes político ideológicas, entre ellas el darwinismo social producto de la sociedad europea transformada por la industrialización y el proceso del colonialismo. El racismo era la ideología que acompañaba el imperialismo europeo justificando la expansión a otros continentes marcando rivalidad y confrontación entre las naciones.


“We dropped´em down”

dijo y su voz temblaba de triunfo que le causaba el recuerdo de aquel bombardeo sobre Frankfurt durante las noches iluminadas por mil fuegos de barrios enteros ardiendo como inmensas antorchas. El hombre, americano y mayor de edad, ya había bebido algo más de la cuenta y nos encontrábamos en un bar de la ciudad de Barranquilla en Colombia. Habían pasado ya muchos años después de la guerra cuando el tripulante de  aquella fortaleza volante – así los llamábamos los niños – que en aqellos instantes nos hallábamos abajo, temblando de miedo, sentados acurrucados en nuestra guarida  en el sótano de la casa. Nosotros recibíamos lo que él descargaba. Pero nuestros sentimientos eran bien diferentes. No sé, si a él también le invadió el miedo, porque la artillería antiaérea alemana, la Flak, no paraba de disparar sembrando muerte y destrucción  entre  la inmensa jauría de los atacantes. Pero, no me equivoco, el hombre, bombardero, encargado de tirarnos la carga letal, se alegraba tanto y se seguía alegrando de algo que a mí me había causado el mayor miedo de mi vida, que tanto fue que durante muchos años no podía escuchar explosiones, sirenas de ambulancias, etc. , sin entrar en pánico.

lunes, 2 de mayo de 2011

Friedrich II El Grande

–¡Fritz!  –  decía  el  padre  –  ¡de  rodillas!
Y le dio una bastonada delante de toda la corte hasta que la sangre brotó de las nalgas. El  príncipe no lloraba mientras su hermana pidió clemencia -­ inutilmente.
–¡Fritz!  –  decía  el  padre  –  ¡no  tienes  honor!  Si  me  hubiesen tratado  a  mí  como  yo  a  ti  te  trato,  me  habría  escapado.