“Pereza
y cobardía son las causas que mantienen dependiente una parte tan grande de la
humanidad, aunque la naturaleza hace tiempo los liberó de toda dirección ajena.
Así es tan fácil para otros usurpar la dirección sobre ellos. Es tan cómodo ser
dependiente. Teniendo un libro que posee inteligencia en mi lugar, un sacerdote
que administra mi conciencia, un médico que juzga mi dieta, entonces no
necisito hacer esfuerzos. No me hace falta pensar, ya que tengo con qué pagar.
Otros se encargarán a tiempo de este asunto tan molesto.”